La consultora estatal además proyecta que las compras de aluminio al exterior se hundirían en más de la mitad.
China, el principal importador de metales del mundo, compró volúmenes récord de aluminio y cobre en 2020, a medida que la rápida recuperación de la demanda tras la pandemia por Covid-19 puso los precios locales por encima de los valores internacionales, lo que abrió la puerta a un arbitraje para buscar insumos industriales en el exterior.
Sin embargo, las importaciones de cobre refinado del gigante asiático caerían un 27% en 2021 respecto a los sólidos niveles del año pasado, en tanto, las compras de aluminio al exterior se hundirían en más de la mitad, acorde a estimaciones de la consultora estatal Antaike.
Según esta entidad de la Asociación de Industrias de Metales No Ferrosos de China, proyecta que las importaciones de cobre refinado totalicen 3,4 millones de toneladas este año, un declive de 27,2% frente a las 4,67 millones de toneladas del 2020, dijo el analista de la firma, He Xiaohui, en un evento sobre perspectivas del mercado.
Tras las compras sin precedentes del año pasado, las importaciones «volverán a sus niveles razonables» este año, afirmó. Los plazos del arbitraje se han cerrado y Antaike prevé que la propia producción de cobre refinado de China crezca en 2021.
Antaike proyecta que el consumo de cobre refinado de China aumentará un 3,7% este año debido a la fuerte demanda de los sectores automotor, inmobiliario y eléctrico.
Se espera que las importaciones netas de aluminio primario de China caigan a 450.000 toneladas en 2021 desde más de 1 millón de toneladas en 2020, dijo el analista senior de Antaike, Shen Lingyan.
Shen estimó que el consumo de aluminio de China se elevará en un 4,2% este año, a 40 millones de toneladas, pero espera que la demanda alcance su punto máximo en 2024 y prevé que las emisiones de carbono del sector toquen un techo en 2025.
FUENTE: Reuters
Tienes algún comentario, avisa al Editor.